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Desde su reapertura en 2016, ha recibido más de 9.000 visitantes y se consolida como uno de los referentes de la Marca Morata
El Ayuntamiento de Morata de Tajuña ha finalizado los trabajos de rehabilitación de la Casa del Molinero, ubicada junto al Museo de la Molinería. Este nuevo espacio destinado a albergar exposiciones y talleres forma parte del plan municipal de promoción y consolidación de la apuesta turística y cultural de la localidad.
Las obras de rehabilitación han consistido en el solado de toda la planta baja del inmueble, así como la reparación de las grietas que presentaban las paredes, la instalación de un nuevo sistema eléctrico, la eliminación de goteras en el techo y el tratamiento contra la carcoma y puesta en valor de las primitivas vigas de madera del complejo industrial.
Además, la habitación posterior, que se encontraba en estado de ruina total, ha sido completamente rehabilitada con la hormigonación y pavimentación del suelo, así como el saneamiento de sus paredes. En la zona exterior, se ha reconstruido el zócalo, se han instalado nuevas cristalerías y se ha pintado la fachada, prolongando la acera hasta el final del edificio.
“La Marca Morata es hoy una seña de identidad en la región. Lo es en parte gracias a tesoros como el Museo de la Molinería que, en estos años, hemos vuelto a poner en valor de la mano de un completo programa de visitas guiadas”, ha explicado el alcalde, Ángel Sánchez, durante su visita a la finalización de los trabajos en compañía de la concejal de Turismo, Carolina González. El regidor morateño ha querido subrayar que el coste de estas obras ha sido muy reducido para las arcas municipales ya que han sido ejecutadas por parte de los operarios municipales.
Más de 9.000 visitantes
Desde su reapertura en 2016, por el Museo de la Molinería han pasado más de 9.000 visitantes. Sólo en su última temporada, más de 1.430 personas pudieron disfrutar de sus instalaciones, un 7% más que en 2020-2021, y eso a pesar de que sólo permanecía abierto dos fines de semana al mes.
A través de las visitas guiadas, quienes se acerquen hasta este molino harinero del siglo XVIII pueden comprender el trabajo del molinero y su familia, así como la importancia de esta industria en la ribera del Tajuña a lo largo de la Historia, en una visita que el 100% de los visitantes calificó de “muy interesante”, superando el 97% de aceptación de la temporada previa.
El Museo de la Molinería estará abierto todos los sábados, domingos y festivos -excepto Navidades y Semana Santa- en horario de 11 a 14 horas y de 16 a 18 horas, hasta el mes de febrero, y de 17 a 19 horas de marzo a junio.
